Ya con mas tranquilidad y menos melancolía escribo estas palabras ahora que estoy parado en medio de la ruta, el camino es muy lejano y no veo nada, ningún letrero que me indique a donde voy, solo se que debo seguir adelante hasta hallar algo. Aun así no puedo evitar levantarme y abrazar un odio, una rabia que guarda mi alma, con todo lo que hay, con todo lo que quedo, estoy peleado con la vida, esa que me dio tanto, pero que dejo con muy poco, un par de zapatillas para volver a caminar, pero no importa no necesito mas. No hay teléfono para llamar pero da igual, cada día quiero menos llamar, ya me estoy acostumbrando a estar aquí en la oscuridad, como alguna vez me sintió familiar, pensé que me costaría mas pero alguna vez transite estas calles, no me son desconocidas, ademas no tengo prisa, nadie me espera, tengo tiempo para sanar y reflexionar, curar mas heridas, y estar mejor preparado para lo que viene, porque cuando llegue estuvo lo mas preparado que tuve, solo que tuve complicaciones siempre inesperadas, pero bueno, no puedo hablar mas, debo tomar mi auto y partir, la ruta me espera.
Han pasado años desde que deje de escribir acá, muchos podrán pensar que las mejoraron pero no, han sido años difíciles pero los dos últimos han sido devastadores, y este ha sido horrible. La vida no fue como yo pensaba, me siento totalmente defraudado de esta, creo haber vivido un sueño que estaba lejos de hacerse realidad. Estoy desesperado, no se que hacer con mi vida, estoy perdido, con nunca antes lo estuve, no se si habrá salida de este túnel eterno en el que estoy. Es triste cuando uno vive y crece en una mentira y esa mentira se llama vida. ¿Podré darle vuelta a esta situación? Si a alguien le interesa podrá averiguarlo acá, porque estoy de regreso, he vuelto al único lugar donde nadie me cuestiona.
Comentarios
Publicar un comentario